- LOS DISTANTES -
Donde duerme la sangre reposan los clavos
de unos valores destripados por los buitres,
que hambrientos de poder van probando bocado
de los corazones que se despeñan en el salitre.
Flotan las ganas de mirar hacia adelante,
de medirse de frente con el porvenir.
Se tiñen de hielo los pálidos semblantes
que vieron sus volcados intentos huir.
Comenzar a remar sin miedo al naufragio
es el reto de las almas deshuesadas
que piden limosna a las puertas de palacio
y sólo reciben esperanzas cansadas.
Habrá que volver a colgarse las alas
de la libertad y rezarle al tiempo
que amenaza con lanzas y espadas
a todo aquel que osó beber del viento.
Y las cosechas serán abundantes
sólo para quien las supo mantener,
para los que se mostraron distantes
de la puta hipocresía y el sucio interés.
- Gonzalo López Murillo -
Julio 2010, Medievo.