-PIRATA DEL OESTE-
Se quebrantan las ganas de volver a devolverme encima
se agotan las sinapsis con tanta neurona resabiada.
Me apetece frenar, leer, toser, dormir boca arriba,
antes de que mi vejez quede oficialmente desvirgada.
Me cansa ese eterno traqueteo del dejarse llevar,
rechinan las estrellas con cada desvarío planificado.
Ya va siendo hora de matar ese ahínco de buscar
esa nada que se ahoga en cualquier vaso cansado.
Me voy conociendo, y como kamikaze me evito
para poder apaciguarme en la cima de la noche.
Vamos creciendo, y como árbol torcido necesito;
sombra y luz, para saber que ya no soy un fantoche.
Dormir con tu recuerdo y despertar olvidando
que la vida es una ramera, cara y caprichosa,
que el tiempo pasa mientras seguimos soñando.
¡Maldito pirata, condenado al parche y la pata coja!
-Gonzalo López Murillo-
Agosto 2014, Angosto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario